martes, 21 de octubre de 2008

Retrato de una torpeza.


Me seduce la idea de perder el tiempo. Quiero dejarme olvidadado y establecerme en la pausa. Busco comprender este blog como un instante de deleite a través de algo que sólo se puede hacer quieto: la reflexión. Espero acercarme a eso que se llama filosofía sin más pretensión que paralizar momentos que pasan veloces a nuestro lado y tomar nota de ellos, perder el paso del tiempo embelesado en la presencia constante de cada suceso.

Parece que un día la filosofía nació gracias al ocio. Por lo menos sabemos que en él se desarrolla. Intentamos defenderla y le atribuimos utilidades. Cometemos, así, el grave error de perder la memoria. En un mundo devorado por el reloj del negocio sólo hay una manera de dotar de dignidad a la filosofía, declararla inútil. Si no sirve para nada nunca será manejable. Por eso filosofía es sinónimo de torpeza, de una lúcida torpeza en ocasiones, me temo.

Con esta idea comienzo una tarea que resulta contradictoria, la de hacer un diario que escape del tiempo y seguir confiar en el fruto de una torpeza.

3 comentarios:

Ainhoa dijo...

Pues suerte... Devolverle la importancia a la filosofía en este mundo de esclavos al reloj es algo complicado.
Pero al fin y al cabo la filosofía es un arte de vivir y que si no sirve para la vida no sirve para nada y hssta el momento a mi sólo me embota la cabeza.

Saludos!

Anónimo dijo...

proeza es anagrama de torpeza

Sheila CP dijo...

Sergiooooo =)
Gracias por tu coment y me alegro mucho de que te haya gustadoo!
Ya he empezado a escribir otro, a ver qué te parece ese tema!
1 beso y FELICIDADES, que sé que hoy es tu cumple!